Ya lo dicen los M-Clan en una cancion "Oigo música en todas partes, dentro de mi cabeza a cada instante..." Pues eso no es nada raro. Si nos fijamos bien la música está presente en nuestras vidas de una forma casi inapreciable pero imprescindible. Todo el mundo, incluso los que dicen que no les gusta la música, viven rodeados de canciones.
Lo que no entiendo bien es el por qué de esa desidia que alimenta los corazones de la gente hoy en día. Si hace 15 años nos hubieran dicho que íbamos a poder asistir a un concierto cada día de la semana en un pequeño local donde poder ver a los músicos a menos de 2 metros de distancia y escuchar su música si artificios, pura y cruda, tal y como la crean en su local de ensayo... habría sido noticia en los telediarios. Hoy en día eso ocurre, por lo menos, en Pamplona donde yo vivo. Creo que si me lo propusiera podría asistir a un concierto cada día durante los 7 días de la semana. ¡y luego dicen que no hay nada que hacer entre semana! Parece que para el grueso de la población un concierto solo es bueno si cuesta 50 euros la entrada y se agotan en menos de una semana.
Tanto los bares como los musicos se esfuerzan por dar una opción que antes no existía y sin embargo la mayoría de la poblacion no la aprecia, no la acepta o simplemente prefiere quedarse en casa viendo la tele o jugando a la "wii". Serán los tiempos modernos que corren o será la evolución del ser humano hacia un modelo mas solitario, aburrido y sin ganas de comunicarse con el resto de su especie. Porque un concierto es algo más que música, es comunicación, reunión, fiesta,.. y, sobre todo, cultura y trabajo a raudales que se regala como si fuera agua de lluvia. Sin importar a quién le caiga encima ni cuánta sea la cantidad. GRATIS!!!! asi es la mayoría de la música que se hace hoy en día y, sin embargo, solo unas pocas decenas de locos la apreciamos.
El viernes pasado estuve en un concierto de "La Prima Janis" y "Sonikete", versiones de Janis Jopplin y de clasicos del rock que acariciaron mis oidos y dejaron mi boca abierta durante casi 3 horas de concierto. Era como para que estuviera la gente llenando la calle y sin hueco para respirar... evidentemente no fue asi porque era gratis y no habia entradas agotadas de por medio ni campaña publicitaria que lo apoyara.
El sabado estuve viendo al grandisimo Andres Calamaro y viví una hora de cola para poder entrar al recinto donde con un despliegue de luces y sonido asombroso disfruté de un concierto de más de dos horas de grandes canciones y excelentes músicos sobre el escenario. No puedeo comparar un concierto con otro porque no sería justo ni objetivo pero el sabado pagué 25 euros por ver un concierto a 30 metros del escenario y con la imposibilidad de beberme una cerveza porque la barra estaba lejos y llena de gente y, sin embargo, el viernes vi otro conciertazo de muy alto nivel (aunque los focos fueran de menos colores y los watios inferiores)a menos de dos metros del escenario, viendo a los músicos reirse, hablar, comunicarse, oyendo hasta las toses del cantante entre cancion y canción y pudiendo acercarme cada vez que quisiera a la barra para hidratar la garganta.
¿Mejor, peor? No, distinto.
¿De verdad que nadie ve esto de lo que hablo? ¿Solo yo valoro tanto la música en directo? ¿Son tan divertidas las consolas y tan buenas las pelis de dvd como para no acercarse a un concierto? ¿De verdad disfrutais más oyendo las mismas canciones del verano en el mismo bar todas las noches?
Igual existe una opción mejor y yo no me he enterado ¿Que haceis mientras unos pocos estamos viendo musica en directo un martes a las 9 de la noche? Si es algo mejor que lo que os acabo de contar llamarme!!!! Si no dejarme tranquilo con mi musica y mi cerveza...
Seré un bicho raro pero disfruto de mi locura.
Sin ánimo de ofender a nadie pero con el sincero ánimo de hacer reflexionar.
lunes, junio 16, 2008
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