sábado, enero 28, 2006

CALMA...


Hoy voy a hablar de una de mis virtudes que a la vez es uno de mis mayores defectos: la prisa. Yo, como muchos otros, soy de los que les gusta hacer las cosas cuanto antes, no dejar para mañana nada que pueda hacer hoy, y no me refiero a esas tipicas cosas de hacer la cama, pagar en el banco o echar la solicitud para que te den la targeta de la zona azul, no, eso si que suelo dejarlo para mañana o mas adelante. Me refiero a las prisas laborales, y yo, cuendo hablo de trabajo, me refiero a la musica. Si tengo una cancion en mente la quiero ensayar, grabar y tocar en directo lo antes posible y eso significa que en una semana puede estar todo hecho. ¿Por que esperar? es la pregunta que siempre esta en mi mente. Si el trabajo que haga hoy me va a dar una satisfaccion... ¿por que retrasarlo?

Pues bien, creo que he encontrado el punto de equilibrio entre mi ansiedad musical y el ritmo del mundo. He llegado a la conclusion de que voy a seguir con el culo prieto por hacer canciones y por grabarlas y por.... hasta aqui. ¡STOP! La creatividad y el trabajo son buenos pero en el mundo en que vivimos hay que hacer las cosas con cabeza. Yo cuando escribo una cancion tengo la necesidad de que sea escuchada para que no muera en mis manos. A mi ya me ha servido para sacar mis demonios y decir lo que quería decir, ahora ha de servir a otros para que merezca la pena seguir siendo interpretada, pero he aprendido que ese proceso no tiene por qué ser inmediato.

El mismisimo Walt Disney debe tener hace años la formula para descongelarse (se cuenta por ahi que esta criogenizado) pero seguro que esta esperando el mejor momento para hacerlo. Solo se puede descongelar a Walt una vez asi que habrá que asegurarse de que salga bien. Eso es lo que vamos a hacer nosotros con nuestro nuevo disco, pensarlo, descongelarlo poco a poco, cocinarlo despacito y sacarlo a la mesa cuando todo el comedor esté muerto de hambre. Igual asi se tarda un poco más y alguna canción se muere por el camino pero, al fin y al cabo, las buenas canciones son las que sobreviven al paso del tiempo y ¿Que es un mes, dos o tres en la vida de una cancion buena?

No es que esta reflexion la haya hecho yo solito, ya me lo habian contado, ya me lo decian pero no lo veia. Hace poco tuve una charla con un conocido-desconocido para mi y, por una de esas situaciones raras que pasan en la vida, lo comprendí todo.

Ahora si, ahora tengo un plan.